Todos llevamos gusto por el cine. Ver tu película preferida al lado de ese ser especial es inolvidable. Luego, van a poder comentar la historia, compartir sus opiniones y pareceres. Es una actividad enriquecedora e integradora.
Otra gran cosa conseguida ha sido merced a que el doctor Masters me aconsejó que olvidase cuánto deseaba saber sobre el sexo, y nos enseñó a Harold y a mí a disfrutar cada uno con el cuerpo del otro, de una forma absoluta… Tengo relaciones íntimas con el hombre que amo. Eso es algo muy grande….
Hay varios casos registrados y comprobados sobre éste hecho y por mencionar uno, una persona se adquirió una moto que tanto deseaba en un mes con solo el hecho de grabar su sonido y escucharlo a diario, aún sin tener los recursos necesarios para la compra.
Mantiene valores, cuida los valores, entre ellos el de la salud. Mas no pienses que el dinero es un valor, es un medio. Con el puedes recobrar la salud, cuidarte, curarte, mas no es un valor, no confundamos los terrenos.
En una relación sana, cada uno de ellos se hace responsable de sí y se valora sin esperar que sea el otro quien resuelva las propias necesidades o bien problemas. Un amor sano es aquel en el que, más allá de los instantes ineludibles de crisis, predominan el bienestar y la satisfacción.
Pero este dolor de corazón tiene la virtud de despertar en muchos las dormidas facultades intelectuales, dejando así que la universal técnica del conquistador avance un poco más, con rumbo al tercer milenio.
Proporcionar un masaje firme en torno a las caderas y el área sagrada. Esto libera mucha energía sexual. Esta es el área en la que trabajan los acupunturistas para liberar y sanar la energía sexual. Utilizando tus pulgares, masajea profundamente en el área sacra.
Por razones de salud debemos cuidar nuestros ojos de futuras lesiones, y por tal motivo el uso de anteojos de sol se hace completamente necesario, existiendo ciertas consideraciones prácticas de buenas formas para el empleo correcto de los lentes.
No tenía sentido proseguirse, pero seguían. Leandro había sido el amor de su vida, el padre de sus hijos, pero su amor se fue diluyendo. Los esfuerzos eran vanos. Inés dejó de apostar por la relación y se halló con Genaro, sin buscarlo, sin pretenderlo.
La serenidad de la mente se alcanza a través de la buena predisposición y la compasión respecto de lo placentero y lo doloroso; y la complacencia y la indiferencia respecto de lo meritorio o bien no meritorio. O bien, a través de la expulsión y la retención del aliento.
